Manuela en Revista Casi Angeles (agosto 2008)

"Si no me divierto, no puedo trabajar"

· Charlamos con Manuela Pal, una actriz con todo terreno y súper amigable, que no se parece en nada a la malísima Franka de Casi Ángeles.

Si la vieras en persona, te costaría mucho imaginártela como la malvada Franka de la Corporación CC. Manuela se viste sencilla, sin una gota de maquillaje y con una sonrisa de oreja a oreja. Además de ser súper simpática, es una tremenda actriz que, aunque muy joven, ya ha hecho de todo. Te vas a sorprender descubriendo a una persona cálida y amable que, a la hora de la merienda, encarna a uno de los personajes más oscuros de Casi Ángeles. ¡Puro talento!

Como en casa
- Naciste en una familia de artistas...
Manu: Así es. Mi abuelo, Pablo Palitos, era artista, igual que mi mamá, Graciela Pal, y mi novio, Guido Massri. Para mí, eso es lo normal. Lo raro sería tener una madre abogada. Debo decir que sí es diferente del resto de la gente. Habiendo elegido esta carrera, a mí me es mucho más fácil contarle a mi mamá lo que quiero y por qué lo elijo.

- ¿Cómo es trabajar con la familia?
Manu: A mi novio lo conocí trabajando, En "Frijolito". Empezamos siendo compañeros, después amigos, hasta que nos pusimos de novios. Con él pegué onda trabajando y el hecho de elegir y amar lo mismo fue lo primero que nos conectó. Además nos divertimos mucho. O trabajar con mi mamá también está buenísimo, porque nos relacionamos desde otro lado. Tenemos re buena relación.

Grandes Sueños
- Hiciste tele, cine y teatro. ¿Con qué te quedás?
Manu: Me quedo con todo. La tele te permite ver a tus compañeros a diario y divertirte mucho. El cine me apasiona, es soñado para cualquier actor, porque manejás tiempos mucho más relajados para hacer tu trabajo. Y teatro, aunque fue lo que más estudié, fue lo que menos hice, ¡pero me encanta!

- Tenés muchos fanáticos, ¡hasta te hicieron un fotolog!
Manu: Me sorprende mucho la repercusión de mi trabajo en el público. Es rarísimo lo que pasa en la calle con la gente. Creo que a mí sólo me pasaría con alguien muuuy lejano, y yo me siento tan cercana, que me cuesta entenderlo.

-¿Pero no creés que es justamente esa cercanía la que despierta tanto fanatismo?
Manu: Sí, porque cuando salgo de grabar siempre me quedo sacándome fotos y firmando autógrafos. ¡Hasta chateo con la chica que me hizo el fotolog! (conmigo!! http://www.fotolog.com/ManuelaPal_Diosa ) Los productos de Cris generan cosas impresionantes en el público.

- Vos ya habías trabajado con Cris en Chiquititas...
Manu: Tenía 11 años. Fue mi primera tira diaria, y el elenco era impresionante. Estuvo buenísimo, fue un furor. De esa época tengo todas las revistas, que mi tía se encargó de comprar en su momento. Hoy las miro y me muero de risa de verme tan chiquita jugando a la "modelo". Además yo, que siempre fui al mismo cole, de repente me encontraba firmándole la revista a mis compañeritos. Fue una experiencia buenísima, y la mejor escuela.

- ¿Qué pensás del personaje que te tocó ahora, más de diez años después?
Manu: Franka está loca, jajaja. Es una mala malísima. Yo no sé qué le habrá pasado en la vida, porque, en el fondo, la corporación para la que trabaja tiene fines nobles. Pero para llegar a ellos, hacen cualquier cosa. No les importa nada. Es muy perversa, pero no porque sí, sino porque está convencida de que hace falta hacer lo que sea para llegar al objetivo de su trabajo. Es un personaje que disfruto mucho de hacer, porque me platea un desafío. Es muy diferente a mí, desde cómo se viste hasta la edad que tiene. ¡Se maquilla mucho! Nada que ver conmigo.

- Leí en algún lado que tu sueño no es ser una súper estrella, sino que se acuerden bien de vos. ¿Hoy sigue siéndolo?
Manu: Sí, totalmente. Yo quiero permanecer, no estar en la cresta de la ola en un momento y que al otro día nadie se acuerde. Y permanecer no sólo como actriz sino como ser humano . Eso es mucho más importante. A mí no me importa triunfar, me interesa disfrutar. Si estás mal, no sirve. ~

EXTRA - Curiosidades



Termina un día más de grabación. Graciela espera al lado del auto que su hija termine de prepararse para partir juntas. Pero Manuela se atrasa. Hasta que por fin aparece, toda apurada. A punto de subirse al auto, se frena y dice: "¡Uy! Me olvidé de saludar a fulanito". La mamá, con impaciencia, la convence de que mañana lo salude. Y ella accede, aunque no muy convencida. Es ritual: hay que saludar hasta el último. "Eso lo heredé de mi mamá. Si no me llevo bien con mis compañeros, si no me divierto, no puedo trabajar. Esta carrera tiene que ver con eso, con disfrutar. Estás poniendo no sólo el cuerpo sino también tus emociones, entonces necesitás generar un buen clima", explica una de las más simpáticas del elenco.

• ¿Sabías que la familia de Manuela es de Andalucía, España? De ellos heredó su fanatismo por el Flamenco.